Cargaron sus sueños en el viento errante
Dejando su hogar por un mañana brillante
Con manos firmes bajo un sol ardiente
Labrando un futuro siendo siempre pacientes
Construyeron caminos, sembraron la tierra
Cargando el peso de una lucha eterna
El racismo los golpeó, pero no los quebró
Porque el amor a sus hijos siempre los guió
Sus manos forjaron lo que otros disfrutan
Pero ahora los echan, como si no importaran
Les llaman delincuentes, los tratan sin razón
Olvidan que son parte de esta gran nación
Padres de acero, raíces profundas
Su sudor engrandeció esta tierra fecunda
No son extraños, son el corazón
La fuerza oculta de esta nación
Lucharon por sus hijos sin mirar atrás
Y ahora les pagan con desprecio y maldad
Trabajaron sin descanso, día tras día
Soportando desprecios con valentía
Por cada insulto, respondieron con fe
Por cada barrera, se mantuvieron de pie
Mientras sus hijos crecían bajo el mismo cielo
Ellos cargaban el peso sin perder el vuelo
No son números, son historias vivas
Sueños rotos y heridas que no se olvidan
El amor fue su escudo, su mayor razón
Y su legado es parte de esta nación
Padres de acero, raíces profundas
Su sudor engrandeció esta tierra fecunda
No son extraños, son el corazón
La fuerza oculta de esta nación
Lucharon por sus hijos sin mirar atrás
Y ahora les pagan con desprecio y maldad
Pero sus raíces no se arrancan fácil
Porque están tejidas con amor incansable
Padres de acero, nunca caerán
Su lucha y su amor siempre vivirán.