El tiempo ya no es sincero
No deja las cosas en su sitio
Es un viejo desordenado
Y hace mucho tiempo que no os veo
Y eso que miro por todos los agujeros
Sombras en las comidas y creyentes de pacotilla
Me regalaron un cenicero enfermo lleno de cabello de ángel
Y busco respuestas en los azares del destino
Y en las cartas dibujadas por manos encantadas
La prisión no nos salvó
Eran barrotes de algodón
Y nosotros presos de un dolor
Esta mañana el Sol y la lluvia se han puesto de acuerdo
Quieren ir a los Pirineos a comer un helado de nubes
Y los esquiadores despistados con monos horrendos
Y cremas de colores para facciones gastadas, muy gastadas
Hago aviones de papel y los lanzo desde la cornisa del hotel
Espero que alguno aterrice en las manos de un soñador
Y construya una habitación llena de ojos y de otro sabor