Hoy quiero decirte Madre lo que siento,
Que te quiero con todo el corazón,
Pues Jesús mismo es quien me regalo tu amor,
Porque decir que no, porque no amarte?
Quiero gritar como Isabel:
Bendita tu entre las mujeres
Y Bendito el fruto de tu vientre!
Quién soy yo, para que la Madre de Mi Señor venga a verme?
Maria: mi alma alaba la grandeza del Señor
Y mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador
Porque ha puesto los ojos en la pequeñez de su esclava
Y le dio la gracia de ser la Madre de Dios hecho hombre.
Y por eso todas las generaciones
Te llamaran bienaventurada
Porque ha hecho en tu favor cosas grandes El Poderoso
Y los que le temen su Misericordia alcanzarán.