A la luz de una vela de cera
Me he sentado a escribir estas letras
Y aunque estén un poquito mal hechas
Lo que digo son cosas muy ciertas
En un tren pasajero se ha ido
Una joven que tanto adoraba
No me llamen un hombre cualquiera
Al decir que por ella lloraba
Recargado en un poste miraba
Cómo el tren por la vía se alejaba
Me sentí solo, triste y perdido
Ay qué tarde friolenta y nublada!
Yo me fui a la primera cantina
Y me tomé muchas copas de vino
Yo no sé maldecir ni maldigo
Pero ahí renegué del destino
Desde aquella cantina miraba
Dos pañuelos que ondeaban muy lejos
Tal vez era el cristal de las copas
O del vino tal vez un reflejo
Yo salí de las calles oscuras
No miraba brillar ni una estrella
Una nube de llanto en mis ojos
Me cegó aquella noche por ella
A la luz de una vela de cera
Me he sentado a escribir mis recuerdos
Todavía no descuelgo el retrato
Dedicado por su puño y dedo
Y a la luz de una vela les firmo
Lo que tanto he guardado en secreto
Salgo en mi juicio y regreso borracho
Porque amor como aquel no lo encuentro