Ahora ha llegado el momento después de la tormenta feroz
Después de ese problema sin razón
Ese cielo oscuro de tono gris
Se transiciona a uno azul y feliz
El llanto y fuerte grito con un beso
Se han transformado en una sonrisa perfecta
Reímos, peleamos, nos besamos
Y nos alejamos aunque es una guerra
Tortura dejar de hablarnos
Una lagrima, una risa, un abrazo, un grito
La tregua pactada entre dos cuerpos fríos
Que gradualmente se vuelven a ver
Esa calida frialdad dura y traicionera
Separa dos corazones que se desesperan
Por abrazar el complemento de su eternidad
Vuelve y demos paz a la soledad
Pues sea uno u otro no nos podemos alejar
Que se entrelacen los dedos
Que al momento se formen uno solo
Mente, alma, cuerpo y corazón