Yeah
Yeah
Tienes que
Salir de aquí, dejar de ceder
Lo inevitable siempre fue parar de correr
He vivido lo suficiente como para ver
Estos patrones que arrastro desde antes de nacer
Son más de diez mil días
Que llevo en mis hombros y pies
Si sigues espirales puedes ver todo al revés
El diablo cambia señales, no me quiero perder
Espero que el agua bendita no acabe esta vez
Porque hoy
Todo lo que soy es veneno y diamantes
Espero que nunca me percibas distante
Rezo pa no olvidarme que yo soy
Hijo de Lizeth, un koi contra corriente
Mi mente nunca duerme y nunca es suficiente
Ojos cansados de un aries que nunca miente
Y sé que a veces no confío en mí
Y no sé cómo explicar
Las ganas de no tener que fingir
Las veces que tuve que dejarme ir
Las mierdas que no me dejan dormir
Tengo mucho que confesar
Pero muy poco tiempo
Un golpe de ansiedad
Siento que me falta el aliento
Siento un pulso entre mis costillas
Siento que me enfrento contra el viento
Siento que no siento
Repiten que debo respirar
Hielo en mi espina dorsal
No quiero drogas pa calmarme
Hablo por mi generación
Y estamos hambrientos
Marcados como nuestros nombres
Escritos en cemento
Hay guerras de las que no quiero hablar
Polvo en mi cuerpo que debo limpiar
Sangre en el suelo, ceniza en el pelo
Interferencias en mi radar
No tengo tiempo pa quejarme, hey
Ni paciencia para escucharte
Mezclando alcohol con humo en el viento
Tengo ambición y sé a lo que me enfrento
Tengo secretos profundos como Mariana
Fuego, Incienso y ganja
Medito por la mañana, quiero ver el nirvana
Y explotar sin desvanecer
No puedo creer que
Siga vivo como Jacob Blake
Aún sigo roto como mi celular
No quiero llamadas, no quiero hablar
Un introvertido, un antisocial
Círculos pequeños, casi familiares
Estoy en proceso de amar mis sombras
Convirtiendo mi cuerpo en un altar
Mira mis pies flotar sobre cobras
Sabor a hierro en mi paladar
Mi humildad no esta para sobras
Estoy confesándome en estas obras
Piensa dos veces lo que deseas
Y ten cuidado con lo que cobras
Piensa muy bien como usar palabras
Miedo al fracaso, lo único que tengo
Elige muy bien las puertas que abras
Nunca olvides de donde vengo
Estoy caminando sobre las aguas
Debo calmar todos los fuegos
Debo cambiar todas las reglas
Debo cambiar todo este juego
Ver el gris entre el blanco y negro
No hacer eclipses con estos dedos
Nací en mil nueve noventa y dos
No pretendo fingir estar bien
Ni debo querer ser Dios