Yo sé que estos rosales se mustiarán un día
Y sé que nuestro anhelo, tendrá temblor de llanto,
Y enfermos de cansancio, iremos por la vida,
Llorando la amargura de nuestro desencanto.
Bien sé que estos rosales florecerán en vano,
Y cuando mi alma deje su cárcel suspirando,
Yo para tus recuerdos seré como un hermano
A quien inútilmente un día esperarás soñando
Más yo desde otro reino, recóndito y lejano,
En el eterno sueño, hermana, te seguiré adorando.
Yo para tus recuerdos seré como un hermano
A quien inútilmente un día esperarás soñando
Más yo desde otro reino, recóndito y lejano,
En el eterno sueño, hermana, te seguiré adorando.