Pienso también en aquel libro que desvelaba los misterios del tiempo la fábula del niño volador cuya ilusión infantil permanecía intacta y le impedía revertir en adulto mientras huía del tictac que lo perseguía como un cazador de sueños. Guardo ese ajado volumen en mi regazo con afecto, porque el tiempo pasa incluso para mí, un simple coleccionista de polvo de hadas.
No dejes nunca de soñar, de ser un niño y de reír
Solo quien sueña aprende a volar
Lo de crecer no era una opción, ni el tiempo una preocupación
El tic tac del reloj un juego, nada más
Yo te enseñaré los colores de este sol
A cabalgar sobre el viento, y a reír
Tiempo, lo verás amor
Es cuestión de tiempo, volverás a flotar
El dolor y la rabia que asolan tu alma desaparecerán
Y saldrá el sol otra vez
Viajaremos en el tiempo hacia el país de los sueños
Surcando las estrellas recto hacia el amanecer
Yo te enseñaré a sirenas escuchar
Sobre la espalda del viento, y a reír
Tiempo, lo verás amor
Es cuestión de tiempo, volverás a flotar
El dolor y la rabia que asolan tu alma desaparecerán
Y saldrá el sol otra vez.