Tiene siete puertas la caja de mi mollera.
Me pierdo por dentro, salgo por la chimenea.
No sé cuando salí. Me duele la cabeza,
Se me han caío' los pelos de tanto reírme.
De tanto reírme por dentro, clarito pero con cuernos.
Rulo y otra vuelta, ya no necesito verte.
Miro como chorrea la gota que cae de aceite.
Pero hasta que yo no caiga al suelo
O no encuentre la razón.
Mis problemas serán como cristales
Si no tengo escogedor.
Tengo que bailar, qué ganas me dan.
La ferretería, allí me vendieron cuerda.
Amarré yo a mis huellas, crecieron las malas yerbas.
Tendré que sonreír, las cosas malas crecen,
Las buenas cosas pasan, no paro de reírme.
Yo crezco como los cardos, te pincho si me haces algo.
No tiene sentido subir pa' bajar corriendo.
Quiero dejar escrita la flor de mi sentimiento.
Pero hasta que yo no caiga al suelo
O no encuentre la razón.
Mis problemas serán como cristales
Si no tengo escogedor.
Tengo que bailar, qué ganas me dan."