Hay tan poca gente en el mundo que se merece un saludo, imagínate cuántos merecen un disco. Por eso quiero agradecer a las pocas personas en mi vida que lo merecen todo. A mi familia por estar siempre presente. A Isabel por su amor incondicional y por traer al mundo a mi hijo. A mi familia de diferente sangre: Charly, Chuki, Nuchito, Los Medrano, Willy, Cogollo, Maki, Samer, Aris, y demasiados más que encontré por el camino y demostraron que merecían quedarse. Gracias a Eva por apoyar mi carrera y confiar en mi arte. Gracias a todos los que han participado y han hecho posible la realización de este disco. Gracias a Miguel Ángel, mi mentor, por enseñarme la droga más dura que existe en el mundo: El sonido. Esta base con la que cierro mi segundo disco ocho años después es suya. Gracias a todos por hacer un universo más bello con vuestra presencia y vuestro cariño. Y por último, y si menos importante, gracias a los rivales, enemigos y envidiosos que surgen en el camino, y a los que se disfrazan de amigos para luego traicionarte. Vuestra presencia sólo sirve para aprender a no bajar la guardia y trabajar duro para no ser lo que vosotros decís. No pasa nada, si algo sobra es aguante. En la vida hay un camino y solamente es adelante.