Se sentó la madrugada en tus ojos de zarzales
No ladré mas al vacile porque vivo como ausente
En esta orilla pensativa, frente al mar de la indecisa
Déjame que me acurruque en la cuenca de tu chocho
De pronto me quedo solo y al octavo voy sin ira
A respirar libertades, donde atracan las palomas
A solas de soledades, a solas de amor y odio
A solas de yugo y hambre y empiezo a descortezarme
Ah! me duele el futuro y el codo de tanto pensar
Ah! me escuecen los años y el morbo
Me mata el piano de cola si lleva amargura en su garganta
Déjame que sea el dueño de tu boca de aguardiente
De tus gritos en caliente, de este amor a bocajarro
Déjame que ande descalzo por mi nube de arboleda
Como noria con la lengua, como la Tierra por todo
Se melló la carcajada entre esputos de chavales
Que jugaban a tirar su juventud por el retrete
Me marché como si nada, ocultándome en las sombras
Por callejas sin charanga, como un vagabundo loco cantando:
El señor de los ganchillos me está haciendo un jerseicillo
De mangas de voluntades y el resto de darle vueltas
A enredos de aburrimiento, a ovillos de descontento
A rollos de mil estambres, que cuelga en perchas de alambre
Ah! me duele el futuro y el codo de tanto pensar
Ah! me escuecen los años y el morbo
Me mata el piano de cola si lleva amargura en su garganta
Déjame que sea el dueño de tu boca de aguardiente
De tus gritos en caliente, de un romance a bocajarro
Déjame que ande descalzo por mi nube de arboleda
Como noria con la lengua, como la Tierra por todo
Vicente mata la gente, con un cuchillo mata los grillos
Con una pala mata las vacas y con un hacha las cucarachas.