Imaginando tu sombra que me acompaña dulcemente
Acostándose a mi lado haciéndome soñar con volver a verte
Cuesta conciliar el sueño en tiempos de añoranza
Donde el frio de mi cuarto no hace más que agudizar tu ausencia
Observo el transitar de la corriente mientras te espero
Triste tu recuerdo, nena
Que no deja mi vida tranquila
Triste tu recuerdo de cuando dejaste mi alma vacía
Triste tu recuerdo, cielo
Que no permite olvidar el día
En el que mi corazón sangró al reconocer tu partida
Sin tu presencia me estanco en la eterna quietud
Y se me paralizan sentidos fuera de lo común
Al recordar tu risa iluminando mi mente siempre oscura
Que sigue en busca de tu luz intensa para no perder su cordura
Ahogándome en mareas profundas de miedo y desolación
Triste tu recuerdo, nena
Que no deja mi vida tranquila
Triste tu recuerdo de cuando dejaste mi alma vacía
Triste tu recuerdo, cielo
Que no permite olvidar el día
En el que mi corazón sangró al reconocer tu partida
No tiene caso buscar posibles reemplazos
Torpe búsqueda que solo me conduce hacia el fracaso
Solo es a vos a quien mi voz le quiero entregar
Triste es tu recuerdo que vuelve triste mi soledad
Triste tu recuerdo, nena
Que no deja mi vida tranquila
Triste tu recuerdo de cuando dejaste mi alma vacía
Vislumbrando tú figura húmeda sobre un manantial de agua dulce